Otro poder: la coma

Hablamos ahora de la coma, de la pestaña que se cae en el texto; la que ceñida a la norma se ajusta, acodada a la palabra, para darle espacio al silencio, a la inhalación. La que introduce un instante de sentido, una separación; la que sienta la distancia y, finalizada, nos abre el próximo inmediato.

Pero, a veces, se trata de volar la coma, decidir obviarla, dejarla ir, hacerse adulta,… 

Antes, sí, debemos conocer su origen, su sentido de ser, su necesidad.

Según la RAE, la coma es:

coma2. Signo de puntuación (,) que indica normalmente la existencia de una pausa breve dentro de un enunciado. Se escribe pegada a la palabra o el signo que la precede y separada por un espacio de la palabra o el signo que la sigue. No siempre su presencia responde a la necesidad de realizar una pausa en la lectura y, viceversa, existen en la lectura pausas breves que no deben marcarse gráficamente mediante comas. Aunque en algunos casos el usar la coma en un determinado lugar del enunciado puede depender del gusto o de la intención de quien escribe, existen comas de presencia obligatoria en un escrito para que este pueda ser correctamente leído e interpretado. (…)

Delimitar, separar, aislar, escribir, distinguir (entre sentidos posibles de un mismo enunciado) son algunas de sus funciones definitivas1.

Y sin embargo: el juego.

Y sin embargo la poesía es juego en el lenguaje y jugar es jugar también al escondite con las reglas ortográficas: asumirlas y escapar de ellas(,) contemplarlas sin dejar que ellas nos vean. 

Sabemos que una coma es poderosa casi tanto como un significado y sabemos que el silencio es poderoso. Omitir la puntuación (al igual que callar una palabra) genera un ruido mudo en el que caben más lecturas(,) más mensajes; también lenguajes nuevos: el espacio en blanco de una coma que esperábamos(,) se convierte en una grieta que conecta con las aguas subterráneas de la imaginación; se convierte en una ambigüedad intolerable a la razón; se convierte en un ecosistema que sonríe y llora al mismo tiempo porque todo significa tantas cosas a la vez.

Otro poder: la coma(,) que es el ritmo al que respira el texto(,) puede o bien ahogarlo o elevarlo. Y aún otro: la coma(,) que es también el vértice que hace esquina en la oración(,) es capaz de dar forma al mensaje: forma de hexaedro(,) forma de octaedro; o si la coma falta: una esfera: todos los sentidos a la vez en un continuo. Para que esto ocurra no obstante es necesario que la ausencia sea obstinada: prescindir de la coma una sola vez no hace esfera sino plano(,) solo cuando se repite(,) solo cuando se repite(,) solo ahí(,) es donde empiezan a curvarse los sentidos: empieza el tobogán.

Al mismo tiempo: no todo es tobogán o no es tan fácil deslizarse y deslizarse. Estando en medio de la suavidad del círculo(,) cabe preguntarse cómo hacer el ritmo: cómo hacerlo sin la coma(,) sin la pausa explícita. Hay que imaginar(,) quizá(,) al lenguaje como un cuadro impresionista(,) como una melodía impresionista: allí el ritmo y la imagen se construyen en el todo y no en las partes. Si la puntuación concentra la cadencia en un golpe de tinta(,) prescindir de ella esparce el golpe en una bruma y una bruma así solo puede percibirse como golpe si se mira desde lejos(,) es decir: entera: en conjunto. El texto(,) el poema que no haga uso de la coma no se puede leer con una lupa; como un cuadro de Monet no se entiende si se le fracciona (fraccionarlo es fracturarlo en este caso)(,) como el claro de luna de Debussy sólo alcanza el orden (lo acaricia) si no se le interrumpe.

Pero el juego no se aprende por la teoría sino haciéndolo o admirándolo.

Así(,) os dejamos algunos ejemplos(,) poemas de poetas que eligieron soplarle al texto las pestañas y pedirle(,) así(,) un deseo al puro azar. Hemos elegido los versos de uno de los pioneros en el arte de agitar las reglas: Guillaume Apollinaire (del que incluimos la versión original, en francés); también los de una autora contemporánea y brillante: Esperanza López Parada.

GUILLAUME APOLLINAIRE
LA HOGUERA

                                                   A Paul-Napoléon Roinard

Tiré en el noble fuego
Que transporto y adoro
Vivas manos y mismo fuego
Ese Pasado esas cabezas de muertos
Llama hago lo que tú quieres

Ese galope repentino de las estrellas
No siendo más que en lo que se convertirá
Se mezcla con el macho relincho
De los centauros en sus acaballaderos
Y de los grandes lamentos vegetales

Dónde están esas cabezas que yo tenía
Dónde el Dios de mi juventud
El amor se ha vuelto malo
Que en la hoguera las llamas renazcan
Mi alma al sol se desnuda

En la llanura han crecido llamas
Nuestros corazones cuelgan de los limoneros
Las cabezas cortadas que me aclaman
Y los astros que han sangrado
No son sino cabezas de mujeres

El río prendido con alfileres sobre la ciudad
Te fija como una prenda
Partiendo del anfión dócil
Padeces todos los tonos encantadores
Que vuelven ágiles las piedras

(De Alcoholes, versión de Claire Deloupy)

LE BRASIER

J’ai jeté dans le noble feu
Que je transporte et que j’adore
De vives mains et même feu
Ce Passé ces têtes de morts
Flamme je fais ce que tu veux
Le galop soudain des étoiles
N’étant que ce qui deviendra
Se mêle au hennissement mâle
Des centaures dans leurs haras
Et des grand’plaintes végétales
Où sont ces têtes que j’avais
Où est le Dieu de ma jeunesse
L’amour est devenu mauvais
Qu’au brasier les flammes renaissent
Mon âme au soleil se dévêt
Dans la plaine ont poussé des flammes
Nos cœurs pendent aux citronniers
Les têtes coupées qui m’acclament
Et les astres qui ont saigné
Ne sont que des têtes de femmes
Le fleuve épinglé sur la ville
T’y fixe comme un vêtement
Partant à l’amphion docile
Tu subis tous les tons charmants

(De Alcools. NRF Gallimard, 1913)

ESPERANZA LÓPEZ PRADA

llámalo resto leño despojo
llámalo náufrago residuo
llámalo padre y madre
niño deshonesto dile traidor
pirata forma en cavidad
-algo has robado algo carnal
algo que no era íntimo-
calco clavo calma calima
dile humo y vapor y gota
titilando encima del cristal
de la caja dile esto ha
quedado hilachas de una
sábana y en la almohada
el trazo donde su cabeza
fue imagen en bajo relieve
de hacia dentro la ausencia

(De Las veces, Editorial Pre-Textos, 2014)

1Véase Diccionario panhispánico de dudas.
https://www.rae.es/dpd/coma

Pilar Trol y Marisa Bello
Consejo editorial agua

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