MIS MUERTOS
mis muertos
despliegan un mantel de huesos
cuerpos intactos de dicha
relampaguean la carne
en ataúdes
de cedro e idolatría
el útero de la muerte
los expande.
UNO CAMINA
Uno camina
bien pegado al piso
con premura de cotidianeidad
de inmaculados pantalones.
La poesía es una baldosa floja
que te salpica para adentro.
APUNTALADO A TABACO
Apuntalado a tabaco
con mi sexo de utilería
trepo en la noche
de la ciudad ambidiestra
arrastrando estos huesos
que pretenden desconocerme.
Nombre:
David.
Apellidos:
González.
Altura:
1,75 m.
Escuela creativa en la que te estás formando o de la que has sido alumno:
Cursé talleres literarios con las poetas y narradoras Lidia Ravonne de Huniken (1989) y
Ana María Destefanis (1996 al 2000).
¿Cómo te has enfrentado al proceso de creación de estos textos?:
Lo sencillo:
Para mí escribir nunca es una tarea sencilla, ya que se acciona los
mecanismos intelectuales, emocionales y de permanente búsqueda estética y de
traspolar los lugares de comodidad en que solemos instalarnos cuando encontramos
una voz poética propia.
Lo difícil:
No repetirse, aprender a soltar los textos y no encariñarnos
demasiado o ser benevolente en demasía con ellos, aceptar las devoluciones o
sugerencias de los editores o amigos poetas, que si bien uno puede no coincidir en
todo, la mirada del otro puede sumarnos o hacernos ver los textos desde otra óptica.
Lo inesperado:
La posibilidad de ser leído en otras partes de Argentina o el
mundo, conocer grandes referentes de la poesía y compartir espacios y proyectos,
generar una voz generacional en la poesía patagónica y Argentina, intercambiar
saberes y visiones con colegas, viajar y conocer otras voces poéticas del mundo.
Dos palabras para describir tu proceso creativo (en relación a los textos que nos envías):
Escribir y corregir.